Ir al contenido principal

Unha cita unamuniana sobre Tui (II)

A publicación o pasado martes dun texto de Miguel de Unamuno sobre unha visita á nosa cidade e a súa contextualización ten suscitado un interese maior do esperado e varios amigos e lectores de Tudensia me facilitan diversos comentarios que enriquecen aquela primeira achega “unamuniana”.

Miguel de Unamuno. Estampa anagramática
do ilustrador tudense Rafael García Sánchez

En primeiro lugar, Álvaro Álvarez Caramés me envía unha interesante crónica do correspondente en Tui do xornal de Pontevedra “El Progreso” que non é outro que o médico Darío Álvarez Limeses, quen describe na súa crónica con todo detalle a estadía en Tui de Miguel de Unamuno. Unha pequena alfaia xornalística que ofrecemos aos nosos lectores:

 

De la provincia

Tuy

D. Miguel de Unamuno

Ayer a las nueve de la noche recibí un telegrama de D. Isidro Buceta anunciándome la llegada de D. Miguel de Unamuno a esta ciudad y pidiéndome que en nombre de la Sociedad Recreo de Artesanos de esa capital saludase al ilustre viajero.

Con gusto cumplí el encargo.

Me trasladé al Hotel Internacional. El sabio catedrático acababa de cenar en aquel momento y se disponía a descansar de la fatiga de un largo viaje. Me recibió afablemente y agradeció mucho el saludo y el ofrecimiento que en nombre del Recreo de Artesanos le hice.

-He venido por la línea de Portugal -me dijo- porque el viaje resulta así más cómodo y porque tenía deseos de conocer el paisaje desde Viana do Castelo a Tuy y admirar las bellezas de esta ciudad. Deseo conocer este explendido panorama que tantas veces oí elogiar al inolvidable Camilo Bargiela, cultísimo escritor, honra de este pueblo. Y Unamuno me habló con entusiasmo del malogrado Bargiela, recordando entre sus obras una muy bella a la que el ilustre hombre había puesto prólogos.

Pregunté a D. Miguel cuando pensaba emprender el viaje a la capital y me dijó: Saldré mañana en el tren rápido. Quiero ver la catedral y cuanto haya de notable en este pueblo. Poco es el tiempo del que dispongo, pero lo aprovecharé.

Desde luego me ofrecí a acompañar al ilustre maestro y hoy a las ocho de la mañana hemos visitado la catedral.

Fotografía de Otto Wunderlich (Stuttgart, 1886 - Madrid, 1975).
Fototeca do Instituto del Patrimonio Histórico Español

En el templo, el beneficiado D. Jesús Fernández Costas con su característica amabilidad mostró al señor Unamuno cuánto hay de notable, reliquias, pergaminos, objetos del culto de gran mérito que así supo apreciar nuestro huésped, quien después de admirar el interior del templo deseó deseos de subir a la torre para contemplar el panorama. Le advertí que había que subir más de cien escaleras y me dijo: No hace mucho he subido trescientas y sin cansancio.

Efectivamente D. Miguel subió a la torre sin mostrar la menor fatiga y ya allí contempló durante largo rato la hermosa perspectiva que ante su vista se ofrecía. Esto es muy bello -exclamó- y dirigió su vista hacia Portugal -¡Pobre país!, digno de mejor muerte- dijo. Luego nerviosamente volvió la vista hacia nuestros campos y valles que no se cansaba de admirar. -Verdaderamente no son exageradas mis informaciones. Este panorama de Tuy supera a lo que yo creía.

Después de permanecer largo tiempo en la torre descendimos otra vez al templo. En la sala capitular leyó unos cuantos pergaminos de gran mérito y al fijarse en un escrito en gallego dijo: -Lástima que esto no se de a la publicidad. Tiene verdadero valor.

Hubiera deseado Unamuno permanecer más tiempo en la observación de las bellezas artísticas que se le ofrecían en abundancia pero el tiempo apremiaba, y después de agradecer muy sinceramente las muestras de atención que en la catedral recibió se despidió de todos y paseó por la Corredera deteniéndose en nuestra hermosa glorieta desde la que se divisa el explendido paisaje de la Vega del Oro rodeada por el Miño.

Apacible el día, despejado el horizonte no podía darse más grata impresión y con ella salió para Pontevedra el sabio Rector de la Universidad de Salamanca a quien tuve el honor de acompañar y ofrecerme en nombre de la entusiasta Sociedad Recreo de Artesanos de ese mi pueblo querido.

Corresponsal

16-8-1912

Publicado en “El Progreso” de Pontevedra de 18-8-1912

 

Cómpre sinalar varios comentarios a esta fermosa crónica. O Hotel Internacional estaba situado, segundo a información que teño, no Paseo da Corredoira, daquela Elduayen, en homenaxe ao político madrileño e deputado por Vigo, concretamente onde estaba o local do Liceo Casino na súa planta baixa, un edificio que naquela altura contaba con poucos anos de existencia. Existían en Tui tamén nestes anos outros establecementos como o Hotel do Comercio, na rúa Martínez Padín, e a Fonda Generosa, na Corredoira.

Por outra banda, xa no texto de Unamuno publicado en “Andanzas e visiones españolas” había unha referencia á amizade entre o escritor bilbaíno e o escritor tudense Camilo Bargiela, con quen comparte estadía en Madrid e pertenza a unha mesma xeración de escritores e creadores.

Concretiza Unamuno esta relación nunha columna publicada no xornal madrileño “El Liberal” o 26 de outubro de 1920: Conocí y traté a Bargiela todo lo que me consentía la escasez y brevedad de mis visitas a Madrid , donde el residió algún tiempo. Era un niño grande, de un buen humor inagotable y hasta humorista, de un humor gallego -que es de los más finos- con una cara de mosquetero en que sobresalían sus grandes bigotes negros. Fue de cónsul a Casablanca y allí murió, joven todavía, de un ataque de angina de pecho, según creo. Y estando en Casablanca le explicó al escribiente moro que tenía en el consulado quien era yo -según Bargiela y para que lo entendiese un moro- e hizo que me dirigiera un saludo en arábigo poético, que con su traducción me remitió. Lo que no sé es si Bargiela tradujo lo del moro o el moro lo de Bargiela. Escribí también a su pedido, un prólogo para una colección de cuentos y relatos suyos, entre los que recuerdo una entrevista entre Don Quijote y Don Juan Tenorio, colección que no llegó a publicar.

Ex-libris de Camilo Bargiela, realizado por Pablo R. Picasso

Podemos concretizar mais esta obra que prologou Unamuno gracias ás investigacións de Emilio Gavilanes no prólogo que realiza á edición na “Biblioteca de Rescate” da Editorial Renacimiento en 2009 do único libro publicado de Bargiela, “Luciérnagas”. Recollemos as súas palabras:

Gracias a las cartas que le escribió Bargiela a Unamuno, sabemos que escribió otro libro, un misterioso libro cuyo contenido conocemos (lo componían, por lo que dice una carta, los cuentos “La Hostería del Laurel”, “La nueva teoría” y “La vacuna integral”, de los que solo conocemos el primero) titulado “Fantasmagorías”, del que mandó copia completa a Unamuno, para que este le escribiera un prólogo sobre el humorismo, que efectivamente escribió y mandó a Bargiela, a quien le gustó mucho, y que iba a llevar una portada –“originalísima”, dice Bargiela- de Picasso

Completamos tamén estas notas con outro interesante dato achegado por Carlos Pérez-Fonterosa, que nos relatou como a pegatina coa frase de Unamuno sobre Tui foi deseñada e impresa polo tudense Álvaro Álvarez Blázquez,  a finais dos anos sesenta ou primeiros da década dos setenta do pasado século. Curiosamente Álvaro era fillo de Darío Álvarez Limeses, o médico e xornalista que atendeu a Miguel de Unamuno na súa estadía tudense.

Lembra Carlos Fonterosa que as xestión foran realizadas a través doutro dos irmáns Álvarez Blázquez, neste caso Emilio, que colaboraba con Álvaro en “Serigrafía Gallega”, unha iniciativa cultural e empresarial de grande transcendencia para a cultura de Galicia, pois dende o obradoiro, instalado na Falperra viguesa, popularizou por toda Galicia e máis aló das nosas fronteiras a produción artística de cerca de trinta pintores galegos daqueles anos.

Álvaro Álvarez Blázquez

Como podemos comprobar con estas breves notas péchase o círculo. Foi Darío Álvarez Limeses quen atendeu a Miguel de Unamuno na súa visita a Tui, onde nos deixou a comentada frase da que nos gabamos todos os tudenses, e foron os seus fillos Emilio e especialmente Álvaro Álvarez Blázquez os que coa edición da pegatina converteron a frase de D. Miguel de Unamuno nun slogan de promoción turística de Tui que aínda hoxe, pasados os anos, segue resultando atractiva.

Finalmente este post nos ten lembrado a débeda que dende Tudensia temos con dous nomes senlleiros na vida tudense, Camino Bargiela e Álvaro Álvarez Blázquez, e que agardamos saldar proximamente.

Gracias Álvaro Álvarez Caramés e a Carlos Pérez-Fonterosa Antón polas súas achegas e amizade.

 

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Emma Álvarez Besada a primeira tudense doutora en medicina

O legado dunha comunidade está conformado por un conxunto de bens materiais, que adoitamos denominar patrimonio, xunto cun amplo abano de elementos inmateriais que definen o seu carácter e a súa pervivencia no tempo. Entre estes bens intanxibles ou inmateriais ocupan un lugar non menor aquelas personalidades que ao longo do tempo teñen deixado unha pegada perdurable na memoria colectiva ou aquelas outras que, ás veces esquecidas ou non recoñecidas, expresan na súa traxectoria fitos senlleiros para a vida colectiva. Hoxe queremos recuperar dende Tudensia unha desas figuras olvidadas pero que no seu momento histórico tiveron unha pegada significativa na vida social e colectiva da nosa cidade e de alén dos seus termos xeográficos. As novas demandas sociais se expresan tamén na historiografía que investiga aos grupos sociais discriminados ou marxinados nos diferentes momentos do pasado. Retrato de Emma Álvarez Besada, foto da orla da Facultade de Medicina de Madrid, 1931 Unha revis...

A fábrica de galletas "La Peninsular"

Temos sinalado neste blog en diversas oportunidades o descoñecemento que posuimos da historia contemporánea de Tui fronte a outros períodos históricos moito mais investigados que a nosa historia mais recente. Aspectos como a vida política tudense na primeira metade do século XX seguen esperando un achegamento como tamén os procesos e dinámicas socias desenvolvidos no noso territorio. Hoxe ofrecemos en Tudensia un post sobre a fábrica de galletas “La Penínsular” que abrangue case medio século da vida económica tudense. Achegamos a información ofrecida polo profesor de historia económica da Universidade de Santiago de Compostela, Angel Ignacio Fernández González, no seu blog “Galicia Agraria” nun documentado post sobre a industria de galletas en Galicia nos principios do século XX. Aportamos a rica e moi completa información que achega profesor Fernández algunha pequena referencia da nosa autoria colocadas como notas. http://galiciaagraria.blogspot.com.es/2012/03/gall...

Lembranza agradecida a Xabier Añoveros

Onte á tarde, nos comezos de setembro, cando xa as horas diúrnas minguaron, o aire nos anticipa a proximidade do outono e as conversas se centraban nestas intranscendencias, recibín a triste noticia do falecemento, no Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, de Xabier Añoveros Trías de Bes, navarro de berce, barcelonés de vida e traxectoria e tudense de corazón.   “ Tuy (con i grego como adoitaba a escribir pois con este arcaísmo semellaba reflectir mellor a antigüidade da nosa cidade) es una ciudad de la que estoy enamorado desde hace muchos años ” e, como é propio dun noivo, a esta vella cidade lle ten dedicado horas, estudos, e moi especialmente un agarimo permanente centrado na súa querida “Casa da Canicouba”. O seu noivado e posterior matrimonio con Julia García-Valdecasas Salgado, filla da tudense Julia Salgado Peñarredonda, o ligou dende 1968 a este outeiro pétreo sobre o Miño, que é Tui. Non sei se foi a longa tradición tudense da familia de Julia, o rico arquivo da Casa da Ca...