O pasado 20 de agosto o xornal La Voz de Galicia publicaba un artigo titulado “Polémica en el Camino Portugués: ¿Va por Tui o por la costa?” asinado por Rebeca Cordobés (https://venagalicia.gal/noticia/2021/08/20/polemica-camino-portugues-va-costa-tui/00031629459513682757620.htm) que contén un cúmulo de inexactitudes e erros, froito do descoñecemento da historia e significación das rutas xacobeas no norte de Portugal que me levou a preparar unha breve nota, publicada onte domingo no mesmo diario, para clarexar unha realidade histórica que non é cuestionable por moitas noticias que se publiquen.
PEREGRINOS POR LOS CAMINOS PORTUGUESES EN LA HISTORIA
Publicaba el pasado sábado 21 de
agosto este diario un artículo ciertamente sorprendente. Primero porque habla
de una guerra en el Norte de Portugal sobre los caminos jacobeos evidenciando
toda la crónica un desconocimiento de la situación. En el Norte de Portugal no
existe ninguna duda, el Camino Portugués, central, que desde Oporto llega, a
través de Barcelos y Ponte de Lima a Valença y entra en Galicia por Tui,
coexiste con el Camino de la Costa, que también desde Oporto, a través de Viana
do Castelo y Caminha, llega a Valença y Tui, donde las barcas de transporte
garantizaban el paso de vecinos, viajeros y caminantes.
En este sentido, se ha
presentado la solicitud de certificación de este último Camino a la Comisión
establecida por el Gobierno de Portugal para la delimitación y oficialización
de las rutas jacobeas en Portugal. Como bien enunció la Asociación de Amigos
del camino de Viana supone el reconocimiento del trazado histórico de una de
las rutas de peregrinación portuguesas a Compostela.
La presencia de peregrinos por
el Camino Portugués está documentada desde los primeros tiempos de la
peregrinación. Existe numerosa documentación que recoge los nombres y
procedencia de los peregrinos, por ejemplo, los registros conservados de los
hospitales de ciudades como Tui para el siglo XVII rescatando del anonimato a
peregrinos de diversas nacionalidades.
Serán los relatos de los
propios peregrinos los que documentan este Camino Portugués a lo largo del
tiempo, nombres como la reina Santa Isabel de Portugal, a rainha Santa, en
1325, o el monarca D. Manuel I en 1502, como ejemplo de los diversos monarcas
lusos que peregrinaron a Compostela.
Constancia de su paso por esta
ruta de peregrinación, con indicación de las ciudades de paso, dejaron, entre
muchos otros peregrinos, Nicolas Lanckmann y Jacobo Motz, embajadores del rey
de Alemania que lo recorren en 1448; el noble bohemio León de Rosmithal de
Baltna que llega a Compostela por este Camino en 1466; el polaco Nicolau
Poielovo ou Popplau, de Silesia en 1484; o el geógrafo y astrónomo alemán
Jeronimo Munzer en 1495; de 1533
conservamos el relato de Fray Claude de Bronseval, secretario del abad del
monasterio de Clairvaux, Edme de Salieu con quien peregrina por el Camino
francés recorriendo luego el Camino Portugués hacia Lisboa; de 1537 es el relato del humanista y
gramático flamenco Nicolás Clenardo, preceptor de los infantes portugueses; de
1581 es el relato de Erich Lassota de
Stevolovo (ou Von Steblau), noble polaco al servicio de Felipe II, cuando
ocupaba los tronos de España y Portugal y también el de Bartolomé
Bourdelot; en 1594 realiza esta peregrinación, con su posterior relato, Gian
Batista Confalonieri, sacerdote italiano; a 1675 corresponde el relato del abad
Giovan Battista Pacichelli; en 1699 recorre este camino Cosme de Médicis,
príncipe heredero del Gran Ducado de Toscana, en una de las peregrinaciones más
conocidas gracias a los dibujos de Pier María Baldi; a 1691 corresponde el relato del peregrino
italiano Domenico Laffi; en 1737 realiza esta ruta el salmantino Diego Torres
Villarroel, o los relatos de las peregrinaciones en 1743 y 1745 de Nicola
Albani…
Son algunos de los nombres y
relatos de peregrinos que documentan como el Camino Portugués ha sido una
realidad viva a lo largo de los siglos. Un trazado que desde Lisboa y Oporto (a
los que muchos de los peregrinos no peninsulares llegaban o partían por vía
marítima) continuaba por Barcelos, Ponte de Lima y Valença, entrando en Galicia
a través de Tui. Igualmente, los que tomaban la ruta cercana a la costa que al
llegar a Caminha remontaban el río Miño hasta Valença y Tui como hizo Cosme de
Médicis y tantos otros peregrinos.
Y finalmente cabe recordar que
en los años en que la peregrinación descendió especialmente, como fue el siglo
XIX son los peregrinos portugueses los que mantuvieron su presencia como se
acredita en los registros del Hospital Real de Santiago.
Por ello las declaraciones de
Adelinne Rucquoi, una de las grandes expertas en la peregrinación con
magnificas aportaciones al respecto, que figuran en este artículo resultan
sorprendentes, al omitir este amplio bagaje de documentación que testimonia la
historicidad del Camino Portugués, una realidad que no puede ser obviada o
ignorada.
Comentarios
Publicar un comentario