Temos recollido en diversas oportunidades en Tudensia textos antigos sobre Tui
que nos permiten acceder a unha visión diacrónica da nosa cidade dende a ollada
e intereses dun visitantes doutros tempos e nos ilustran sobre a evolución
histórica desta localidade.
Presentamos hoxe as páxinas escritas en torno a 1572 por un historiador e
cronista de grande prestixio naquel momento, Ambrosio de Morales, que visita,
como veremos, o Noroeste da Península entre xuño de 1572 e febreiro de 1573 e
nos deixa varias páxinas de interese sobre a Tuyd, que é como escribe o nome da
nosa cidade.
Natural de Córdoba,
onde nace en 1513. Estuda na Universidade de Alcalá e na de Salamanca, onde é
Reitor o seu tío, o humanista Fernán Pérez de la Oliva. Aos vinte anos profesa
como xerónimo, e exaltado de fervor chega a castrarse para extinguir toda
tentación. Tivo que saír da Orde de San Xerome por tal suceso pero consegue,
tras unha viaxe a Roma, continuar a súa vida con hábito secular. Completa a súa
formación na Universidade Complutense que, dende a súa fundación polo cardeal Cisneros,
era a principal institución cultural e ideolóxica daquel tempo.
Pouco antes de 1550
obtivo a cátedra de retórica nesta universidade e comezou unha produción
científica abondosa que o acredita como unha das personalidades mais preclaras
do século XVI español, tanto pola súa heteroxénea formación como pola
importancia e innovación das súas investigacións no ámbito dos estudos de historia
e arqueoloxía.
En torno a 1559 a
súa sona chega ata a Coroa e comeza a recibir encargos de parte do monarca
Filipe II que mostra a súa satisfacción ao nomealo, en 1563, como cronista
real. Un destes encargos rexios foi a busca de manuscritos e obras impresas
para destinalas á recen creada biblioteca de El Escorial, o que posibilitou que
Ambrosio de Morales descubrise importantes crónicas, códices e manuscritos que
foron integrados naquela biblioteca real.
En torno a 1577
recibe do novo arcebispo de Toledo, o cardeal Quiroga, o nomeamento como
administrador dos hospitais de Puente del Arzobispo, aloxándose da súa
actividade científica. En 1581 retorno a súa cidade natal de Córdoba, afectado
xa de problemas de saúde, onde reside ata a súa morte en 1591.
A gran achega de Morales
como historiador é a elaboración da “Crónica de España”. No mesmo ano do
seu nomeamento como cronista as Cortes solicitan ao Rei que continuase a publicación
das Crónicas de España iniciadas por Florián Ocampo. Nesta tarefa pon especial
empeño en realizar unha historia referendada polas fontes documentais e
arqueolóxicas, cuestionando numerosas tradicións e lendas. Para continuar coa
elaboración desta crónica Morales emprende unha viaxe de carácter científico
por toda a xeografía peninsular na procura de datos e documentos para a
redacción da historia antiga e medieval do reino. Nestas viaxes recompilou
numerosas crónicas, anais e outros documentos históricos de grandísimo valor e
tratou, por todos os medios, o recoñecemento e descrición das antigüidades de España,
estudando “in situ” numerosos obxectos de interese, analizándoos con espírito
crítico e grande atención. A súa “Crónica General de España” editada
entre 1574-1577 é moi superior á de Florián de Ocampo e introduce por vez
primeira unha metodoloxía científica en España.
Un froito destas viaxes
pola península é o informe realizado en 1573, cuxo manuscrito orixinal se
conserva na Real Academia da Historia, que sería publicado por Enrique Flórez
dous séculos despois, en 1765, titulado: Viage de Ambrosio de Morales por
orden del Rey D. Phelippe II a los Reynos de León, y Galicia y Principado de
Asturias. O propio Flórez recoñece ter empregado esta obra na redacción da
súa monumental “España Sagrada”.
O mandato do monarca
era que lle trouxera razón y certificación por vista de ojos de las tres
cosas ya dichas; Reliquias, Enterramientos Reales, y Libros antiguos, que en
todas partes se hallasen. Asi pois o principal obxectivo desta viaxe era
reunir reliquias, libros, documentos e pezas con destino á colección do mosteiro
de San Lourenzo do Escorial.
Esta viaxe e
actividade de Ambrosio de Morales por encargo de Filipe II responde a un
programa ideolóxico de fortalecemento da monarquía hispana baseado en tres ámbitos:
relixión, dinastía e coñecemento. Concretado no traballo encargado a Morales de
procura de: reliquias, sepulturas rexias e libros antigos.
Esta obra, escrita
en primeira persoa, e dirixida á lectura por parte do monarca, é unha obra
descritiva. Para a investigadora Rosa María dos Santos Capelao esta viaxe de
Ambrosio de Morales: acabó por transformarse en un elemento esencial en el
proceso de construcción de un poder real centralizado y centralizador a través
por un lado, de la identificación de espacios políticos, religiosos y
culturales, que en algunos casos vivían de forma autónoma con sus propias
lógicas y prioridades. Por otro lado, también buscó señalizar las fuentes de un
poder simbólico a través de elementos religiosos, dinásticos y objetos de
conocimiento, pues el poder real además de alimentado por mecanismos de
afirmación política y estrategias administrativas, también depende del poder
carismático de los símbolos – políticos, religiosos, culturales-, que dan
sostenibilidad a la persona del monarca. El viaje es en este contexto un medio
que se hace imprescindible para la afirmación de un poder político
centralizado. Esto fue posible gracias a una nueva mirada que se vislumbra en
nuestro viajero, y la cual nos obliga a referirnos a un encuadramiento
contextual específico, el Humanismo. Este estimuló la búsqueda de testimonios
de un pasado remoto, de preferencia clásico, el coleccionismo privado, y
favoreció que se desenvolviese una mirada crítica junto con nuevos
procedimientos metodológicos que cuestionaron la autenticidad de ciertos
testimonios (véase: https://ler.letras.up.pt/uploads/ficheiros/8832.pdf).
Realizada esta
necesaria contextualización reproducimos de seguido o texto elaborado por Ambrosio
de Morales na súa vista á nosa cidade no ano 1572:
TUYD.
Esta Ciudad está tan cerca de
Portugal, que pasando el Rio Miño
por ella, la otra Ribera
con el Lugar de Valencia que está en
ella, es ya de
aquel Reyno. Es
Tuyd tierra de grandes frescuras de Naranjos, y todos frutales, con ser de lo
bueno de Galicia en fertilidad.
El Conde D. Rarnón juntamente con
su muger la Infanta
D. Urraca, quando ,tenian el
Señorio y Gobierno de Galicia en
vida del Rey
D. Alonso su suegro, y Padre,
dieron la Ciudad y su
tierra a la Iglesia y al Obispo della ,como aparece por Privilegio de
once de Febrero año MXCV
y en la
misma Escritura confirma el Rey
D.Alonso. Hay otro Privilegio de
confirmación del Emperador D. Alonso , hijo de los
pasados.
Después pareció que quitó la Ciudad á la Iglesia y a Obispo, el rey D.
Fernando de León, hijo de D. Sancho el Deseado, por que hay Privilegio donde se
le restituye: su data en la Ciudad de Santiago primero dia de Abril. El año no
está señalado por número sino por estas palabras: el año que el dicho D.
Fernando Rey famosisimo con grande gloria prendió al Rey D. Alonso, Rey de
Portugal, en Vadaloncio.
Hay algunas confirmaciones de los Reyes siguientes.
En la Capilla Mayor al lado del Evangelio en el Crucero está la Capilla del
Santísimo Sacramento, y allí está el bendito Cuerpo del bienaventurado Fr.
Pedro González Telmo, llamado comunmente San Telmo, principalmente por los
Navegantes, que mucho se le encomiendan. Está con mucha decencia en un arco
alto de piedra con reja delante, en un Arca de plata labrada de vultos de medio relieve, y encima su vulto
de la misma chapería de plata, tamaño como el natural, la suma de su vida es
ésta.
Fue pequeño de cuerpo, alegre de rostro, natural de Fromeste, de parientes
honrados y ricos, llamados Telmos por su Alcuña, sobrino del Obispo de Palencia
que a la sazón era, y el lo hizo estudiar en aquella Ciudad, y lo ordenó , y le
dió allí un Canonicato, y despues tuvo tambien la dignidad de Prior de aquella
Iglesia. De allí le llamó Dios con ocasión bien manifiesta, y tomó el Habito de
S. Domingo. Cuentanse grandes particularidades de su santidad desde estos
principios, y despues en su ocupacion, que fue siempre confesar y predicar. El
Rey D. Fernando el Santo con la noticia que tuvo de su gran santidad lo llevó
consigo al Cerco de Sevilla, adonde obró Dios por el un gran milagro. Despues
siendo conventual en el monasterio de S. Domingo, predicaba por la tierra, y
más ordinario por esto de Tuid y sus comarcas.
Comenzó á hacer milagros, y juntó limosnas, y hizo de ellas algunas Puentes
de las señaladas que hay en Galicia por gran necesidad que habia dellas,
señaladamente para pasar á oir Misa, que se busca en aquella tierra por harto
camino en algunas partes. Supo quando habia de morir, e hizose traer a Tuyd
para esto, y falleció Lunes de Quasimodo el año de nuestro Redemptor MCCXLVI.
Enterrole el famoso Obispo D. Lucas de Tuyd muy solemnemente como á Santo, y
pusole una lauda de piedra con letras, que agora ya no se pueden leer. Su
Fiesta se celebra con haber no mas que conmemoracion de el en Visperas del
Domingo de Quasimodo en cualquier tiempo de cayga , y a dia siguiente tambien
en la Misa. Aquel dia hay gran concurso de toda la tierra, y en algunos de
aquellos lugares principales de Galicia y Portugal alli cerca, tiene Cofradias.
Y los milagros que han sucedido por el Santo son muchos: harta parte de ellos
con todo lo de su vida, está escrito en un libro Santoral de pergamino de la
Iglesia Mayor, y parece de mas de doscientos años : y en este libro hay tambien
otras cosas de mucha importancia para la Iglesia, y la Dignidad de su Silla
Cathedral.
Sin lo de su Fiesta, todos los Sabados antes de la Misa Mayor van el Obispo
y Beneficiados en procesion à la Capilla de su Sepultura de agora con el Te
Deum Laudamus y y dicen la oracion, que hay propia del Santo, y esto se hace de
tiempo inmemorial.
El obispo D. Diego de Avellaneda teniendo deseo de honrar este Santo,
determinó sacarlo de alli donde estaba antes sepultado: halló resistencia de
muchos de su Capitulo, mas à fin una noche despues de Maytines con algunos
Capitulares hizo quitar la lauda y cabar la Sepultura. A medio estado de halló
otra lauda con que el Obispo se regocijo mucho pensando estaba luego debajo
della el bendito Cuerpo. Quitada la piedra se halló tierra maziza, por donde
los Canonigos de contrario parecer le convencian que no se cabase mas. El
Obispo tambien con lagrimas manifestó su congoja, mas perseverando en su
devocion , mandó cabar adelante hasta otra tercera lauda que se descubrió à
otro estado de hondo. Quitada esta pareció un encage de cuatro maderos muy
gruesos, y dentro de ellos en Arca de piedra el bendito Cuerpo con su habito
negro y blanco, y su baculo. Sacaronlo con gran procesion y alegria de todos, y
parecióse bien por quan gran thesoro lo tenia el Obispo D. Lucas, quando à tan
recaudo y con tanta solemnidad lo guardaba. El Obispo Avellaneda le puso à su
costa tan ricamente como está agora. Y todo esto de la invencion y devocion
cuentan los Beneficiados de la Iglesia que se hallaron entonces presentes.
En la sacristia tienen el habito que en trescientos años no se consumió del
todo, y tiene buen olor, y el Obispo me dió de su mano un poquito que muestra
el milagro de haberse conservado. Tenianlo en una Arquita no muy decentemente,
mas à la hora de agora tengo por cierto está muy bien., porque el Obsipo à mi
advertencia se ofreció a hacerlo. Mejor está el baculo, todo engastado en
plata, y en la procesión de su Fiesta lo lleva el Obispo levantado en alto: es
pequeño y como muleta. Tambien tienen alli la cinta del Santo, en quien ha
sucedido un gran milagro.
Alli en la Sacristia tienen muchas Reliquias menudas, y una sola muy
insigne, que es la Cabeza de San Binardo, uno de los diez mil martires de
Alejandria, cuya Fiesta es à los 22 de Junio. Está bien engastada con vulto de
plata hasta los pechos con decir en la Diadema Caput Sancti Binardi Martyris.
Tiene buen testimonio por que la trujo el Cardenal D. Gaspar de Avalos, con
otras muchas reliquias bien atestiguadas.
No tienen Libros, ni enterramientos Reales, mas hacen un aiversario por el
Conde D. Ramón, y por su suegro, y su muger y por el otro Rey D. Henrique el II
y San Telmo no esta canonizado, sino que la devocion y milagros le han hecho
tener en tanta veneracion.
Aunque no es de mi comisión, todavia quiero decir que se saca oro en Tuyd
del Rio Miño, y el Obispo tiene un grano del tamaño de un garbanzo pequeño, que
se sacó habrá dos años y como lantejas se sacan hartos , y es oro purísimo: y
el Conde de Monterrey arrienda un sitio de esta Ribera en 24 ducados cada año,
o 24 mil maravedis, si bien me acuerdo, para solo sacar oro, y sin duda por
falta de industria no se saca todo lo que Plinio encarece de estos Rios, y es cosa
que yo traté muy a la larga en Coronica.
No hay memoria ninguna en edificio, ni en otra cosa de la Fundación Griega
de aquella ciudad, sino es una Pila de fuente con quince pies de diametro, y
tan honda que llena de terra sirve de Jardin, y tiene arbolillos. Está más de
dos, y aun tres estados alta del suelo, fue una peña que labraron en el mismo
lugar donde estaba, y cortaron después las peñas y tierra en derredor, y asi
quedó levantada al igual de unas ventanas por donde se cultiva el Jardín.
De Griegos tambien es haber conservado la lucha, y usarlas en las Ferias y en los otros ayuntamientos de gran muchedumbre. La Fiesta que con esto hacen es cierto insigne, porque tienen diversos generos de maña y destreza, y siendo hombres de grandes fuerzas, se aprietan algunas veces tanto, que se ve como están a punto de muerte. Y entonces se sueltan por el peligro que sienten, porque todo se hace en buena amistad. Luchan en carnes como Griegos con solo pañitos, y tienen particularidades y leyes en la Fiesta, que mucho la regocijan.
Este texto de
Ambrosio de Morales corresponde coa visita que realiza a Tui no ano 1572 do
texto podemos abordar diversos comentarios de interese, lembrando que naquela
altura ocupaba a sede tudense, o bispo Diego de Torquemada.
En primeiro lugar,
que se centra no mandato recibido do monarca: estudo das reliquias (unicamente
amosa interese polas de San Telmo e a de San Binardo), polos libros e
documentos antigos (cita ao Pasionario e polo datos que narra no seu relato
consultou os pergamiños conservados no Arquivo da Catedral que conteñen os privilexios
da sede tudense) e ao non existir sepulturas rexias recolle a relación do culto
catedralicio coa monarquía, centrado en varios aniversarios de monarcas.
En segundo lugar, resulta de interese a súa referencia ao culto e devoción santelmiana na Catedral, co relato do traslado da sepultura de San Telmo dende a entrada do templo catedralicio á capela dos bispos, no lado do Evanxeo (na actual capela do Cristo da Agonía), onde o bispo Diego de Avellaneda buscaba un maior realce do culto ao patrón da cidade. Aínda na actualidade podemos ollar nesta capela os restos decorativos do altar realizado con motivos platerescos, propios daqueles anos iniciais do século XVI.
Resulta interesante comprobar a continuidade na
data de celebración da festividade de San Telmo, o culto que tiña na Catedral e
como xa daquela existía unha celebración popular, centrada posiblemente na
feira anual, que reunía a moitos visitantes na nosa cidade.
En terceiro lugar,
Ambrosio de Morales froito da súa inquietude e interese aporta outros datos
relevantes. A permanencia da explotación aurífera do leito do río Miño, que o
conde de Monterrei arrendaba por un importe relevante, pois continuaba
aportando mineral de ouro, con pezas excepcionais como a que móstralle o propio
bispo Torquemada. Unha minaría no río Miño que entronca directamente cos tempo
da romanización, pois como acreditan recentes investigacións a explotación aurífera
do Miño no territorio tudense era de gran intensidade conservándose aínda as
pegadas destes métodos mineiros de época romana.
Por último, o texto
de Ambrosio de Morales afonda nas supostas tradicións gregas existentes en Tui
como testemuña da súa orixe grega. Un tema que Morales, gracias ao seu amplo
coñecemento das fontes clásicas grecolatinas, coñecía e que enlaza co interese
que neste século XVI existe pola revitalización desta tradición na nosa cidade
co obxectivo de incrementar o seu prestixio (temos abordado este tema en
Tudensia ao falar da suposta fundación de Tui por Diomedes de Etolia: http://tudensia.blogspot.com/2009/07/encol-da-fundacion-de-tui-por-diomedes.html
ou das armas heráldicas da cidade: http://tudensia.blogspot.com/2020/02/as-armas-heraldicas-da-cidade-de-tui.html
En primeiro lugar,
aborda a descrición da pía existente xunto á entrada oeste da cidade, na porta
homónima: una Pila de fuente con quince pies de diametro, y tan honda que
llena de terra sirve de Jardin, y tiene arbolillos. Está más de dos, y aun tres
estados alta del suelo, fue una peña que labraron en el mismo lugar donde
estaba, y cortaron después las peñas y tierra en derredor, y asi quedó
levantada al igual de unas ventanas por donde se cultiva el Jardín. Trátase
pois dunha gran pía escavada e labrada na rocha do lugar que tería unhas dimensións
de arredor de catro metros e medio de diámetro destinada como sinala o propio Morales
a servir de fonte na entrada da cidade para o abastecemento dos veciños (sería
o único lugar con auga na época medieval), aínda que non ofrece a súa
localización concreta.
Sobre esta pía
Enrique Flórez ao falar de Tui no volume XXII da súa monumental obra “España Sagrada”
editado en 1767 comenta: Ya no persevera más que la casa llamada de la Pila
junto a la qual estuvo : y hay ancianos que la vieron : pero su grandeza, que
la hacía recoger mucha agua y no poca inmundicia, la ocasionó su destrucción,
para evitar el mal olor, y hálitos perjudiciales, que especialmente en verano
ocasionaba a las casas vecinas (...) pero acerca del modo con que explica la
formación y colocación de la Pila no hay seguridad.
Tamén o historiador
tudense Francisco Avila y La Cueva na súa afamada obra sobre a nosa cidade,
escrita en torno a 1852, comenta sobre esta pía o seguinte: Hoy en día no hay noticia de esta casa (de la Pila) por
haber borrado su memoria el tiempo, cuya pila debió ser muy célebre y señalada
de la antigüedad por cuanto dió nombre a una de las puertas de esta ciudad que
tiene su salida acia donde existió aquella.
Recentemente o historiador tudense Suso Vila nos seus traballos sobre a presenza xudía en Tui vincula esta pía coa existencia dunha mikvé ou espazo destinado ao baño ritual dos xudeus dada a localización da sinagoga neste espazo urbano: la existencia de una famosa pía/pila, que daría nombre a una de las más importantes puertas de la ciudad medieval, junto a la sinagoga tudense, permite interpretarla como parte del baño ritual hebreo, ya que su proximidad a la sinagoga y sus características sólo hace posible que tuviese ese destino. Estamos diante dunha hipótese de traballo que precisa a súa verificación documental ou arqueolóxica.
Sobre a
localización desta pía, que Ambrosio de Morales non especifica, será Suso Vila
quen gracias a senllos apeos de bens de 1529 e 1556 a localiza nun espazo intramuros
cerca da porta a que lle da nome: unha casa que “sale con puerta al eyrado
donde esta la pila grande” (...) el eirado, un espacio abierto dentro de la
ciudad, del que habla el documento y al cual salía la casa de María Castellana
se ha conservado parcialmente hoy en día como acceso al caserón de los Sarmiento-Zelaya
en la calle Ordoñez. Neste lugar está situada na actualidade a sinalización
turística da sinagoga e a mikvé da ruta do patrimonio xudeu tudense.Tomado de://www.galiciamaxica.eu/mini/un-paseo-por-el-casco-vello-de-tui/dir lenda
Sen embargo é
preciso resaltar que esa zona urbana tivo numerosas alteracións ao longo dos
séculos que dificultan esta identificación. Neste espazo levantouse, en torno a
1669, a carnicería da cidade (e a peixería ao sur da porta da Pía) cunha estrutura
cuberta que apoiaba na muralla medieval. Posteriormente, entre 1813 e 1824 o
Concello promove a construción da nova Praza do Comestible, que non incluía
unicamente a edificación de novos postos senón a apertura en condicións da rúa
que unía a Porta da Pía coa Rúa Nova, derrubando a falsa braga neste espazo e
nivelando esta rúa. Para esta obra foi derrubada a torre das Estrabancas que
obstruía a zona e reedificouse o tramo da muralla (na actual rúa Ordoñez).
Sabemos que no ano
1859 o tramo da muralla situado ao norte da Porta da Pía foi sacado a poxa polo
Estado no proceso desamortizador de bens públicos. O rico propietario José
Sarmiento Zelaya adquire este tramo e en febreiro de 1862 obtén autorización
municipal para reedificar a fachada da súa casa que da á Praza do Comestible (o
que implica o derrube da muralla) e completar unha vivenda que ata daquela tiña
unicamente acceso intramuros, e agora a través dun patio con acceso directo dende
esta Praza (no lugar do eirado da pía medieval? Se así fose estaría totalmente
alterado pois esta a un nivel inferior o que implica a destrucción do nivel
medieva) levantando un casarón que aínda hoxe podemos contemplar.
Finalmente, Ambrosio
de Morales describe as loitas que se celebraban na cidade como un entretemento
público e que liga a tradicións gregas. Este tipo de loitas estaba moi
estendido noutrora, e aínda hoxe conservamos testemuñas destas loitas
tradicionais na loita canaria, na loita leonesa (ou aluche) ou a galhofa ou
loita tradicional da zona portuguesa de Tras-os-Montes.
Imaxe antiga dos Aluches - loita leonesa |
Flórez xa no século XVIII comenta sobre estas loitas: Esto persevera hasta hoy, aunque no es tan frecuente como antes, ni desnudos sino en camisa y calzoncillos. Si los dos competidores son muy diestros, dura mucho la lucha, hasta que rendidos caen ambos à un tiempo. Pero Avila y La Cueva, a mediados do século XIX, sinala que en la actualidad ya son casi del todo desconocidos estos entretenimientos públicos, aínda que el cita como de orixe grego outra tradición moi estendida nas romarías de Galicia ata tempos recentes a chamada carreira da fogaza ou bolo (hogaza en castelán), un tema sobre o que trataremos nun vindeiro post.
Este relato de Ambrosio
de Morales é, como temos comprobado, unha interesante fonte documental da vida
tudense na segunda metade do século XVI.
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