A procesión do Santo Enterro de 1880

Recolliamos o pasado luns o programa da Semana Santa tudense de 1880 tal como figura no xornal tudense “El Eco del Miño”; unha información que agora ampliamos con outra crónica do mesmo xornal na que describe con moita concreción o contido do desfile procesional do Santo Enterro, na tardiña do Venres Santo.

Procesión do Santo Enterro no Venres Santo

A descrición que de seguido publicamos documenta un cortexo procesional propio da escenografía litúrxica do barroco hispano que era, ao mesmo tempo, unha excepcional forma de transmisión das doutrinas bíblicas e dos principais episodios da historia da salvación recollida na Biblia. Podemos atopar preto de nós unha referencia nas procesións da Semana Santa de Braga, onde esta tradición do desfile de personaxes bíblicos nos cortexos procesionais da Semana Santa coa presenza de numerosos figurante foi reorganizada nas últimas décadas. Xunto ás procesión dos Pasos, Ecce Homo e Santo Enterro (que se celebran o domingos de Ramos e Xoves e Venres Santo respectivamente) dende 1998, recollendo diversas tradicións perdidas, o Mercores Santo existe o chamado Cortejo bíblico “Vós sereis o meu povo” percorre a narración dos principais episodios da historia da salvación dende Abraham ata Xesucristo, revitalizando as tradicións de relixiosidade popular bracarense e converténdose tamén nun dos principais atractivos destas datas na cidade de Braga. Resulta moi interesante esta experiencia bracarense de actualización e promoción das tradicións da Semana Santa que teñen recuperado presenza e intensidade.

O contido desta procesión do Santo Enterro de Tui agochaba unhas referencias culturais que hoxe temos perdido (tanto na nosa cidade como en tantos outros lugares) e que nos impiden acceder a contidos básico da nosa tradición cultural  que ten na cultura xudeo-cristián o seu fundamento básico. Unha ignorancia que dificulta, entre outros moitas cousas, a comprensión de boa parte do noso patrimonio cultural realizado con estas claves ás que hoxe a nosa sociedade ten renunciado a súa transmisión.

Ilustraremos esta evocación desta procesión do Santo Enterro con diversas fotografías tomadas da colección de facebook “Fotografías antiguas de Tui” e que alí están identificadas como imaxes da Semana Santa tudense pero que agora podemos contextualizar axeitadamente, pois correspondían aos figurantes que participaban neste cortexo procesional da tardiña do Venres Santo de Tui. Aproveito para felicitar aos promotores e colaboradores deste proxecto cooperativo que están a recuperar e conservar a memoria da imaxe de Tui, gracias por este labor que a todos nos enriquece.

Dos diversos grupos de figurantes que participaban nesta procesión de 1880 na actualidade unicamente conservamos a presenza dos "gardas románs" que acompañan, tanto neste cortexo do Santo Enterro como na procesión dos Pasos ou do Encontro, a figura de Cristo, que testemuñan a continuidade das tradicións da Semana Santa tudense. 

LA PROCESIÓN DEL SANTO ENTIERRO

Entre los solemnísimos actos religiosos de Semana Santa que tienen lugar en esta religiosa Ciudad, llama particularmente la atención de los vecinos y extraños por su singularidad y significación mística la magnífica procesión del Santo Entierro. Gracias a los esfuerzos del Iltre. Ayuntamiento y al desinterés de los vecinos del pueblo, la de este año no ha desmerecido en nada a las que se verificaron en los pasados.

El orden que en la misma se ha observado fue el siguiente: Rompía la marcha el pendón o bandera negra con cruz roja y seguían inmediatamente los arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael ostentando los atributos con los que la Iglesia acostumbra a representarlos, y haciendo grupos con estos se veía al Ángel Custodio empuñando la espada y ofreciendo la corona al vencedor: quince Ángeles graciosamente vestidos  conducían en sus inocentes manos los instrumentos crueles de la Pasión del Redentor: Cruz, lanza, martillo, etc.

Arcanxo San Miguel

Arcanxo San Rafael

Figurante con símbolos da Paixón: escaleira e sudario

Neno coa cruz da Paixón

Aquí terminaba el mundo superior, el mundo de los espíritus para dar lugar a los personajes ilustres que acá en el suelo tuvieron una parte tan interesante en la realización de los misterios de Dios, referentes a la Encarnación del Verbo y Redención del género humano. Aparecía, pues, en primer lugar el anciano Abraham con la cuchilla levantada pronto a descargar el golpe sobre su hijo Isaac, como el Autor de la Vida se los había ordenado, á fin de probar su fe, pero al mismo tiempo se veía al Ángel del Señor detener su brazo porque Jeovah no acepta los sacrificios humanos; al anciano patriarca seguía el ilustre Legislador de Israel, Moisés, mostrando al pueblo aquellas dos misteriosas tablas en que el Señor grabó con su divina mano la ley que había de regir al mundo; cuatro robustos Levitas llevan sobre sus hombros el Arca de la Alianza en la cual se contenían magníficos recuerdos de la liberalidad de Dios con su pueblo escogido; después del Arca ocupaba su lugar el Sumo Sacerdote adornado con las vestiduras pontificales y llevando en sus manos el incensario, en aquella actitud magestuosa con que penetraba en el tempo de Dios; el Real Profeta ostentando las insignias de su dignidad, llevaba en sus manos el arpa con que celebraba las grandezas del Señor; Juda presentaba desde los montes de Betulia la cabeza ensangrentada de Holofernes que había ido a buscar al campo de sus enemigos y a la misma tienda en que dormía profundísimamente.

Nenas figurantes cos símbolos das virtudes

Figurante

Aquí terminaba el Antiguo Testamento cediendo su lugar al Nuevo en la Cruz y Sábana Santa que llevaba en alto el sacerdote, se representaba el doloroso sacrificio del Calvario, en el cual se realizó aquel misterioso encuentro de la misericordia y la verdad, aquel ósculo de la justicia y la paz de que nos hablan los libros Santos: cuatro mugeres célebres en la Ley de gracia y que comprendían los prodigios de la vida del Salvador seguían de cerca al glorioso trofeo: la Samaritana, la Viuda de Naín, la Verónica y María Magdalena, todas cuatro modelos de heroísmo y prueba constante de los que puede ser el débil corazón de la mujer animado de la fe y la caridad cristiana.

A continuación de estas heroínas daba precisamente su principio el Santo Entierro: precedido de la Cruz Parroquial, era conducido en hombros de sus ministros y custodiado por los guardas que habían puesto sus enemigos, guardas que habían puesto en el Sepulcro del Salvador, cuya ensangrentada imagen hacía ver hasta que punto le condujo su amor hacia los hombres; acompañaba al Santo Sepulcro la música religiosa que repetía tristemente los dolorosos acentos del Miserere que la Iglesia, nuestra Madre entona en aquellos días de aflicción al finalizar la Horas de sus oficios divinos; seguían los dos valerosos discípulos de Jesús, José y Nicodemo que le habían bajado del suplicio y dado honrosa sepultura; la Madre Dolorosa é Hijas de Jerusalén acompañaban de cerca a Áquel que no habían abandonado en los tormentos de la cruz cerrando esta magnifica y misteriosa procesión la Virgen sin consuelos, la dulce Madre, testigo de todos los tormentos de su Hijo Santísimo, la cual llevaba en su pecho la espada del dolor más agudo, al verse sola y apartada de la Prenda querida de su Corazón.

Grupo gardas de "románs"

Por demás parece el decir que todas las autoridades y corporaciones de esta muy noble Ciudad han tomado parte del fúnebre cortejo. Precedía la piadosa Hermandad del Smo. Cristo de la Agonía llevando todos sobre su pecho el distintivo de la Cofradía; le seguía el Colegio de los Seminaristas internos dirigido por los Ser. Superiores, el clero parroquial con su digno Cura Ecónomo revestido de Capa pluvial; el dignísimo Prelado de la Diócesis con sus familiares y otros señores individuos del clero catedral; la oficialidad del Batallón Reserva y su digno gefe; los Sres. Empleados de Aduanas y otros individuos cerrando este cortejo el Ilustre Ayuntamiento presidido por el Sr. Alcalde ostentando todos el distintivo propio de su autoridad. Acompañaba la procesión la Banda de Música del Batallón Cazadores nº 7 residente en la plaza de Valenza del vecino Reino y un piquete o escolta de Carabineros.

La concurrencia fue numerosa tanto de familias portuguesas como de gentes circunvecinas.

Los hijos de Tuy pueden tener un justo orgullo en los actos religiosos que se llevan a cabo durante la Semana Mayor, sobre todo el Santo Entierro, y deben procurar con empeño conservar esta religiosa costumbre ideada y fomentada por la piedad de nuestros antepasados.

A celebración nestes días das xornadas do Solemne Triduo Pacual, que actualizan o misterio da morte e resurrección de Xesús, interrompen a presenza diaria de Tudensia que retomaremos o lúns de Pascoa. Boa Semana Santa e feliz Pascua!